Tras dos años de incertidumbres marcados por la pandemia del coronavirus, las compañías aseguradoras apuestan por la digitalización para hacer frente a los retos del futuro. Así se desprende del informe “Perspectivas España 2021” de KPMG en el que se apunta que casi 8 de cada 10 compañías aseguradoras tiene intención de invertir en herramientas tecnológicas, en concreto, destacan el big data, analítica avanzada, Inteligencia Artificial o Cloud.
El papel de la tecnología será determinante para marcar la senda de recuperación del sector en los próximos meses. Un futuro marcado por los ciberataques, considerados una de las principales amenazas para las aseguradoras, puesto que se estima que una de cada tres compañías de seguros recibió un ciberataque en el último año. “La apuesta por la digitalización es una de las garantías de futuro para el sector asegurador, ya sea para salvaguardar la ciberseguridad de los clientes sino también para ofrecer programas de fidelización y una experiencia de cliente personalizada y contextual”, comenta Eduardo Esparza, VP General Manager España y Brasil de Tenerity, compañía experta en fidelización rentable.
Datos, personalización y flexibilidad, tendencias del 2022
En cuanto a las tendencias y retos que marcarán los próximos meses en el sector, desde Tenerity señalan que la generación de valor a través de los datos, la personalización y experiencia de cliente, la adaptación y flexibilidad ante el nuevo tipo de consumidor más exigente tras la pandemia serán algunas de las tendencias que protagonizarán los próximos meses.
- El valor de los datos. Las aseguradoras disponen de grandes cantidades de datos de los clientes y sus tipos de pólizas. Tras el correcto análisis se podrá comprender todo el potencial para usarlos de forma estratégica para el negocio. “El Open Banking abre una puerta a que las compañías sean capaces de facilitar a los clientes pólizas que se ajustan a sus necesidades. El poder de los datos abre las puertas a nuevas ventas cruzadas y un conocimiento del cliente sin precedentes”, apunta Esparza.
- Programas de recompensas. La retención de clientes está estrechamente ligada con su grado de satisfacción. Una de las opciones para las aseguradoras es apoyarse en plataformas tecnológicas que desarrollan soluciones de fidelización y customer engagement a través de recompensas, ofertas y contenidos exclusivos adaptadas en base al perfil del consumidor.
- Flexibilidad y empatía. La pandemia ha puesto de manifiesto que los usuarios confían en las marcas con valores y propósitos diferenciados. En este sentido, los asegurados esperan de sus compañías de seguros un alto grado de empatía y consideración. Conocedores de estas exigencias, la flexibilidad será una de las líneas de trabajo que marcarán el curso de las compañías de seguros este año.
- El cliente es el centro de la estrategia. Acostumbrados a manejarse en entornos digitales, los consumidores reclaman más que nunca una experiencia de cliente que esté a la altura de su nivel de exigencia. El reto para las aseguradoras pasa por observar mejor al cliente y anticiparse ante a sus necesidades para, de esa forma, ajustar la propuesta de valor de forma personalizada. “Las aseguradoras observan nuevos modelos de negocio como el pago por uso, y también están habilitando nuevas pólizas y productos fruto de los cambios de hábitos sociales”, señala Eduardo.
La apuesta por tecnología es la llave del cambio para el sector asegurador. “El desafío para las aseguradoras es mantener una comunicación fluida con los clientes que perdure en el tiempo más allá de momentos puntuales como la renovación de la póliza o el parte de siniestros. Los datos, los programas de fidelización y las experiencias de cliente personalizadas se ponen al servicio de las compañías de seguros para mejorar la relación que mantienen con sus asegurados”, concluye el directivo de Tenerity.